Cours Citoyenneté et mondes virtuels (CE)
Exercice d'application

Dedicas demasiado tiempo a Internet

 

Documento 1

Al principio, todo fue bastante bien. Adela fue una niña despejada1 y curiosa, que obtenía calificaciones muy aceptables en la escuela y solía leer de vez en cuando libros adecuados para su edad. Nada espectacular, pero suficiente. Mi primera decepción fue comprobar que, cuando llegó el momento de elegir, prefería sin lugar a dudas las ciencias a las humanidades. Pero después todo fue poco a poco empeorando2. Por supuesto, jamás me opuse directamente a su afición a Internet y a que pasase cada vez más tiempo prendida del ordenador, incluso desdeñando a veces otras diversiones juveniles que a mí me parecían – quizá por nostalgia – más propias de su edad. A fin de cuentas, la pantalla y el teclado son el signo característico de los tiempos a los que ella pertenece. Lo malo es que sus resultados escolares fueron siendo cada vez más deficientes. Ha ido pasando los últimos cursos del bachillerato a trancas y barrancas3, hasta llegar al definitivo, en el que debe preparar el examen de Selectividad que le abrirá o le cerrará el paso a una carrera universitaria, la que sea, me da igual: la que ella prefiera. Pero tal como van las cosas, ese examen decisivo puede ser también infranqueable. La profesora encargada de coordinar los estudios de su curso me dio cita en el instituto y me comunicó las malas noticias que yo desgraciadamente presentía:

–Pues no sé qué le ocurre a Adela, pero la verdad es que no pone ya interés, todo lo hace de cualquier manera, por cumplir. No quiero ocultárselo: si sigue así, veo muy difícil que logre superar4 el examen de Selectividad. Y menos con una nota decente, que le permita después elegir la carrera que más le atraiga. Aunque no hay que desesperar, hasta fin de curso todavía faltan bastantes meses…

–Yo creo que dedica demasiado tiempo a Internet, mucho más que a estudiar.

–Pues eso es algo que hay que corregir. Todavía estamos a tiempo.

Fernando Savater, Los invitados de la princesa, 2012

1 despejada: éveillée

2 empeorar: empirer 

3 a trancas y barrancas: tant bien que mal 

4 superar = aprobar

 

Documento 2

Poco después en casa.

–Me ha llamado tu jefa de estudios para hablarme de ti. Creo que vas mal, que no progresas. Hasta me ha dado a entender que probablemente suspenderás la Selectividad.

–No digas chorradas, mamá. Prácticamente todo el mundo aprueba la Selectividad.

–Eso dicen, pero hay suspensos, ¿no? Parece que si te descuidas puedes ser uno de ellos. Además, si apruebas con una nota muy baja quizá luego no puedas elegir la carrera que más te guste.

–Bueno, no tengo ninguna preferencia especial, de modo que escogeré la que pueda con mi puntuación. Además, ni siquiera tengo claro si quiero ir a la universidad.

Me estremecí1 al oírla.

–Adela, es tu futuro…

–Ya, vale. No soy una rica heredera y todo eso. Pero hago lo que puedo. ¿Qué más quieres?

Esa era precisamente la pregunta que yo temía.

–Pues no sé… Quizá pierdes demasiado tiempo en Internet…

Fernando Savater, Los invitados de la princesa, 2012

1 estremecerse: (ici) sursauter

 

Question

Diga de qué trata cada uno de los documentos y cómo se relacionan con el eje temático « Citoyenneté et mondes virtuels ».